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consideró que los desechos caninos son una fuente de contaminación que se encuentra en la misma categoría que

los derrames de petróleo y los productos tóxicos.

Los residuos caninos representan un problema para cualquier comunidad, ciudad, alcaldía o entidad pública, porque son tóxicos (transmiten enfermedades y contaminan el suministro de agua), producen contaminación invisible (olores desagradables) y contaminación visual.

Cuando no existe una solución de gestión de desechos de mascotas, se incrementan los problemas de salud, afectando principalmente a la población más vulnerable (niños menores de 5 años, adultos de la tercera edad y población con un sistema inmunitario débil).

consideró que los desechos caninos son una fuente de contaminación que se encuentra en la misma categoría que

los derrames de petróleo y los productos tóxicos.

Los residuos caninos representan un problema para cualquier comunidad, ciudad, alcaldía o entidad pública, porque son tóxicos (transmiten enfermedades y contaminan el suministro de agua), producen contaminación invisible (olores desagradables) y contaminación visual.

Cuando no existe una solución de gestión de desechos de mascotas, se incrementan los problemas de salud, afectando principalmente a la población más vulnerable (niños menores de 5 años, adultos de la tercera edad y población con un sistema inmunitario débil).

Beneficios

Mayor Consciencia y Cultura

Cuando se proporciona una solución de este tipo, es socialmente inaceptable que el dueño de una mascota se olvide de recoger, debido a que se desarrolla consciencia comunitaria en pro del cuidado del medio ambiente y del bienestar de los habitantes.

Centralización de Desechos Caninos

Cuando los dueños de las mascotas cuentan con estaciones específicas para depositar las heces caninas se elimina la contaminación cruzada en los contenedores destinados a los desechos orgánicos e inorgánicos reciclables.

Mayor Nivel de Satisfacción de la Población

Cuando los administradores de propiedades, las alcaldías y las ciudades implementan soluciones de gestión de desechos caninos, incrementa la satisfacción de la población que tiene mascotas, porque sus necesidades son tomadas en cuenta, así como del resto de la población, porque disminuye la contaminación en los espacios públicos.

Mejora de la Salud

Debido a que casi el 33% de la contaminación del agua se atribuye a la falta de gestión de los desechos caninos.

Costo – Beneficio

Los gastos en insumos y personal de limpieza disminuyen considerablemente cuando se proporciona una solución de gestión de desechos de mascotas.

Agua

La lluvia arrastra hacia el subsuelo los restos de heces caninas que no han sido recogidas y entran en contacto con el agua subterránea viajando a través de ella durante muchos kilómetros.
VER MAS...

La contaminación del agua subterránea conlleva un peligro serio de propagación de patógenos y bacterias resistentes a los antibióticos, que pueden provocar problemas ambientales y de salud pública.

Las heces caninas, al ser altas en nutrientes se convierten en alimento para las hierbas malas y las algas, provocando que el agua se vuelva turbia y verdosa y, por ende, produzca mal olor.

El crecimiento excesivo de las plantas acuáticas consume oxígeno y, en ocasiones, produce amoníaco que, al combinarse con altas temperaturas puede matar a las especies que viven en el agua.

La EPA calcula que los desechos caninos de dos o tres días de tan sólo 100 perros generarían suficientes bacterias para limitar temporalmente el ingreso a una bahía y a las áreas acuíferas en un radio de 32 kilómetros.

Suelo

Los parásitos y bacterias de los excrementos caninos pueden permanecer en la tierra por varios años, lo que representa un riesgo de transmisión de enfermedades para las personas y las mascotas.
VER MAS...

Los niños corren el mayor riesgo de infección, ya que juegan en los parques, áreas verdes y espacios públicos y luego se llevan las manos a la boca o a los ojos.

Los adultos y los adolescentes que practican deportes en zonas recreativas abiertas también están expuestos a las enfermedades provocadas por la falta de estrategias de gestión de desechos caninos.

Biodiversidad y Funcionamiento Del Ecosistema

Los excrementos de los perros añaden fósforo y nitrógeno a los ecosistemas naturales al igual que la industria y los vehículos. Las heces caninas provocan que desaparezcan las especies más raras, impactando negativamente la biodiversidad.

Enfermedades

Cuando las heces se solidifican, se convierten en polvo y son dispersadas por el agua y el viento ingresando en el organismo de las personas y los animales a través del aire que respiran, del agua y de los alimentos que consumen.
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Los desechos caninos pueden provocar las siguientes enfermedades:

  • Salmonella
  • Escherichia Coli
  • Giardia
  • Toxocariosis
  • Ancylostomosis (puede adquirirse también por vía cutánea)
  • Cryptosporidium
  • Bacterias resistentes a los antibióticos que se vuelven muy difíciles de tratar
  • Problemas renales

Estas infecciones suelen provocar fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, vómito y diarrea. Los niños son especialmente susceptibles, ya que juegan habitualmente en la tierra y se llevan los dedos y otros objetos a la boca o a los ojos.

Agua

La lluvia arrastra hacia el subsuelo los restos de heces caninas que no han sido recogidas y entran en contacto con el agua subterránea viajando a través de ella durante muchos kilómetros.
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La contaminación del agua subterránea conlleva un peligro serio de propagación de patógenos y bacterias resistentes a los antibióticos, que pueden provocar problemas ambientales y de salud pública.

Las heces caninas, al ser altas en nutrientes se convierten en alimento para las hierbas malas y las algas, provocando que el agua se vuelva turbia y verdosa y, por ende, produzca mal olor.

El crecimiento excesivo de las plantas acuáticas consume oxígeno y, en ocasiones, produce amoníaco que, al combinarse con altas temperaturas puede matar a las especies que viven en el agua.

La EPA calcula que los desechos caninos de dos o tres días de tan sólo 100 perros generarían suficientes bacterias para limitar temporalmente el ingreso a una bahía y a las áreas acuíferas en un radio de 32 kilómetros.

Suelo

Los parásitos y bacterias de los excrementos caninos pueden permanecer en la tierra por varios años, lo que representa un riesgo de transmisión de enfermedades para las personas y las mascotas.
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Los niños corren el mayor riesgo de infección, ya que juegan en los parques, áreas verdes y espacios públicos y luego se llevan las manos a la boca o a los ojos.

Los adultos y los adolescentes que practican deportes en zonas recreativas abiertas también están expuestos a las enfermedades provocadas por la falta de estrategias de gestión de desechos caninos.

Biodiversidad y Funcionamiento Del Ecosistema

Los excrementos de los perros añaden fósforo y nitrógeno a los ecosistemas naturales al igual que la industria y los vehículos. Las heces caninas provocan que desaparezcan las especies más raras, impactando negativamente la biodiversidad.

Enfermedades

Cuando las heces se solidifican, se convierten en polvo y son dispersadas por el agua y el viento ingresando en el organismo de las personas y los animales a través del aire que respiran, del agua y de los alimentos que consumen.
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  • Salmonella
  • Escherichia Coli
  • Giardia
  • Toxocariosis
  • Ancylostomosis (puede adquirirse también por vía cutánea)
  • Cryptosporidium
  • Bacterias resistentes a los antibióticos que se vuelven muy difíciles de tratar
  • Problemas renales

Estas infecciones suelen provocar fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, vómito y diarrea. Los niños son especialmente susceptibles, ya que juegan habitualmente en la tierra y se llevan los dedos y otros objetos a la boca o a los ojos.

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